En A&B Investments, hay una figura que brilla con luz propia, no solo por su destreza con los números, sino por la calidez humana que irradia. Hablamos de Alfredo Affilastro, uno de nuestros contadores, un hombre cuya nobleza ha arropado a todo su equipo de trabajo, mostrando en cada jornada una sonrisa, una palabra de aliento, una guía certera y una fraternidad inquebrantable. Sin duda alguna, uno de los recursos humanos más valiosos que tenemos en nuestra corporación.
Alfredo Affilastro es mucho más que un contador. Es un ejemplo de perseverancia y pasión. Su historia laboral inició cuando estaba por cumplir 15 años, como pasante en el Instituto Nacional de Hipódromos, un trabajo de fin de semana que le permitía costear sus estudios universitarios, que raramente no estaban alineados con lo que es hoy.
Se graduó muy joven como T.S.U en Informática, trabajó en un ministerio, y creó la primera página web de un ente público en Venezuela. Pese a este gran logró, no sentía que ese era el lugar indicado para sentar sus raíces, y esto lo llevó a adentrarse en el mundo que hoy es su verdadera pasión: La contabilidad.
Su camino profesional se trazó a través de la banca, pasando por el Banco de Venezuela y el extinto Banco Caracas, donde se sumergió en el mundo de las carteras de inversión. Pero su voraz pasión por el aprendizaje continuo le hicieron moverse nuevamente, en búsqueda de nuevos desafíos.
«Me retiré de la banca y me voy a trabajar en una firma de contadores internacional como asesor contable, estuve varios años allí, me cambié a otra de mayor alcance, y estando en esa uno de nuestros clientes más grandes me pidió trabajar de forma directa con ellos, me pareció una buena oportunidad, y la acepté. Estuve con esa empresa 17 años».
Allí inició como Coordinador de Contabilidad; y paso por varios cargos hasta convertirse en el Contralor de la empresa. Además, la organización le financió sus estudios universitarios para que pudiera graduarse como licenciado en Contaduría Pública.
«Me pagaron la carrera y en 3 años y medio me gradué», recuerda con orgullo, mencionando que, además, logró el hito de ser el primer contador en dar el discurso de cierre de graduación en su promoción en la Universidad Alejandro de Humboldt, gracias a su destacado promedio.
En sus tres décadas de experiencia laboral, que abarcan nueve empresas, en las que llegó a tener a cargo casi 100 personas, Alfredo ha fortalecido su capacidad para liderar y resolver los desafíos más complejos. Todo esto, le permitió tener una visión integral durante su entrevista con nosotros, aceptó trabajar en A&B Investments, porque desde el día uno supo que era una empresa con un futuro prometedor no solo para él, sino para el país. Está con nosotros desde el 2.023.
«La diferencia aquí, con respecto a las otras empresas donde he laborado realmente es la actitud visionaria que tiene el presidente, y cómo es transmitida a cada una de las personas que formamos parte esta organización», afirma, conmovido por el ambiente de trabajo colaborativo y la dedicación de sus compañeros.
Su mayor logro profesional, nos cuenta, es haber ayudado a las empresas donde ha trabajado a construir sistemas contables sólidos. «Cuando llegué al grupo A&B, fortalecimos sus sistemas contables, y en la actualidad esto es referencia para toda la corporación a la que pertenecemos, apostando cada día a la excelencia de todas nuestras operaciones», nos revela.
Asegura que, sin un buen contador, las empresas corren un gran riesgo: “Se irían a la quiebra. Somos nosotros quienes creamos los modos y formas para que los planes de negocios se conviertan en una realidad rentable”.
Detrás de su figura profesional, encontramos a un Alfredo familiar, tranquilo, que disfruta de la vida con su hijo, a quien define como «el mayor logro” de su vida». Es un hombre de familia, que valora a sus cinco hermanos y a su padre, a quienes “ama y adora”.
El secreto para ser un buen contador, según Alfredo, es el estudio constante, pero, sobre todo, el aprendizaje de los demás. «Los contadores no nos las sabemos todas y cada persona tiene conocimientos en ciertas áreas de las que tú te puedes nutrir», nos dice, demostrando su humildad y su espíritu de trabajo en equipo.
En A&B Investments, Alfredo Affilastro no solo ha sido un pilar fundamental en la organización de nuestras finanzas, sino también un ejemplo de liderazgo, humanidad y dedicación. Su mensaje final a su equipo es un reflejo de su carácter: «Cuentan conmigo, tienen todo mi apoyo y lo que necesiten, estoy siempre, tengo las puertas abiertas para ellos». Unas palabras que resuenan con la misma nobleza que ha demostrado a lo largo de toda su carrera.
